El vals es uno de los más elegantes géneros de música y danza que se forman con compás de 3/4 alcanzando su gran auge de popularización durante el siglo XIX entre la realeza y la alta sociedad, aunque sus orígenes no se saben con certeza de donde provienen se le atribuye a las regiones rurales de Tirol entre los países de Alemania y Austria donde surgió este estilo.
A finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX en aquellas regiones rurales eran populares ciertos estilos de bailes campestres que aún se conservan en la actualidad como danzas folclóricas, entre estas danzas existe un estilo conocido como ländler y lo más probable es que éste sea el antecesor directo del famoso vals clásico que ha perdurado hasta nuestro días.
El ländler al igual que el vals se caracteriza por ser un estilo que se forma con compas ternario, se trata de una danza donde existen más variaciones de movimientos, giros y una de sus principales características son los movimientos fluidos de brazos semejantes al estilo alemanda barroca. A diferencia de vals que es exclusivamente un baile de pareja en el estilo ländler también puede ser ejecutado de manera grupal, en la actualidad esta danza folclórica es común verla acompañada con Schuhplattler que es otro estilo muy representativo de Austria y Alemania, los participantes de dichos bailes suelen portan los típicos trajes tradicionales de Tirol (Tracht).
A pesar de que en un principio la danza ländler fue considerado de mal gusto por la alta sociedad todo apunta a que ländler de alguna manera fue expandiéndose más allá de las zonas rurales hasta ser absorbido por la burocracia donde gracias a los grandes maestros y compositores del siglo XIX fue evolucionando a los distintivos y clásicos vals hasta convertirlo en un elegante baile de salón que se hizo popular entre la realeza durante la época victoriana.
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