Nikola Tesla es considerado uno de los más celebres inventores que la historia ha dado en estos últimos siglos, conocido por sus revolucionarias aportaciones a la tecnología del suministro de electricidad de corriente alterna, este científico de origen austriaco también cultivó un mundo de sueños e ideas que iban más allá de lo que sus contemporáneos podían lograr imaginar. Tesla fue conocido por su capacidad de visualizar sus inventos con un asombroso detalle antes de llevarlos a cabo. Se cuenta, que en sus propios sueños, se adentraba a un misterioso mundo donde podía ver cómo funcionaban sus creaciones, y al mismo tiempo anticipar problemas antes de ponerlas en prácticas. Esta habilidad de visualización, le permitió desarrollar innovadoras ideas que indudablemente marcaron hito dentro de la historia de la tecnología y ciencia.
Nikola Tesla recurría a los conocidos sueños lucidos con la intención impulsar su creatividad o simplemente para resolver ciertos problemas. Tesla creía fielmente que los sueños eran una ventana a nuestro subconsciente, un lugar donde se almacenan las ideas más creativas y originales. Para lograr alcanzar su estado de conciencia mientras dormía, Tesla se sentaba colocando una moneda sobre su cabeza, posteriormente, al quedarse dormido, el sonido de la moneda cayendo dentro de un cubo de metal hacía encender su estado de alerta y de esta manera alcanzaba la lucidez dentro de sus propios sueños. Esta habilidad le habría permitido explorar ideas y conceptos de manera más profunda y detalladas. Además, Tesla tenía una profunda fascinación por la energía y la naturaleza, usaba los sueños como una forma única de conectarse con fuerzas más grandes que él y de comprender el funcionamiento del mismo universo.
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